Una relación tóxica se llama tóxica por una razón. Los efectos de una relación a largo plazo pueden causar daños perjudiciales, de los que puede llevar tiempo recuperarse.
El problema de dejar una relación tóxica es que, por mucho que les quieras, no podéis estar juntos. Como todavía te preocupas por ellos, puede ser difícil seguir adelante. Sin embargo, te aseguro que una vez que hayas superado la fase inicial de la ruptura, las cosas mejorarán. Estar en una relación tóxica no sólo es frustrante, sino también emocionalmente dañino. Si alguna vez has estado en una, o si estás actualmente en una, entonces ya sabes cómo el empuje/tiro tóxico de una relación tóxica puede llegar a ser inmensamente doloroso.
Para aquellos que están tratando de avanzar desde una relación tóxica por esa misma razón, aquí hay 7 maneras de hacer esa transición más fácil.
No esperes un cierre.
Con las relaciones tóxicas, no es probable que obtengas un cierre. En la mayoría de los casos, tendrás que cortar los lazos con esa persona, y no le va a gustar. Puede que incluso intenten perseguirte, pero lo mejor es bloquearlos y seguir adelante. Cuanto más intentes aferrarte para cerrar la relación, más probable es que acabes retrocediendo. Al igual que una adicción, tendrás que dejar de fumar.
NO te pongas en contacto con ellos para saber cómo están.
Cuando te vayas, llévate todo lo que tienes. No preguntes por ellos. No preguntes a tus amigos por ellos, y hagas lo que hagas, NO intentes acercarte a ellos. Sólo conseguirás que el ciclo vuelva a empezar.
Crea un sistema de apoyo.
En lugar de intentar buscar un rebote y en lugar de aislarte, crea un sistema de apoyo de familiares y amigos. Cuando sientas que estás cayendo, habla con tu sistema de apoyo.
Cataloga lo que has pasado.
Habla con tu sistema de apoyo sobre lo que has pasado y escribe un diario sobre ello. Sé sincero y honesto y no dejes nada fuera. Proporciónate recordatorios de lo que te empujó a dejarlo.
Vuelve a descubrirte a ti mismo.
Estar en una relación tóxica puede hacer que sea difícil discernir quién eres. A menudo, nos mimetizamos con nuestras parejas tóxicas y nos perdemos de vista a nosotros mismos. Ahora, que has roto, es el momento de volver a contactar contigo.
Practica el autocuidado.
No seas tan duro contigo mismo. Vas a tener días malos y en esos días, cuídate especialmente. Todo el objetivo es no volver a salir con ellos, así que haz lo que sea necesario para proteger ese objetivo.
Mantén tu decisión.
Pase lo que pase – no vuelvas. No importa si aparecen en tu puerta prometiendo que han cambiado. Tuvieron su oportunidad, y la probabilidad de que hayan cambiado es escasa o nula.