Puede ser un Asunto mundial como una guerra de alta tensión o algo personal como la autocuración.
Todas estas situaciones inducen un período prolongado de estrés. Para lidiar con ello, todos necesitamos instrumentos como los métodos de amor propio.
Cada persona tiene recursos y circunstancias diferentes. Así que echa un vistazo a los métodos que aparecen a continuación y comprueba qué principios son los más adecuados para ti.
Afrontar las cosas tal y como vienen a diario
Aunque nos enfrentemos a un estrés prolongado, no podemos dejar de planificar nuestro futuro. Sin embargo, es muy útil si podemos permanecer centrados en el momento presente. Date la oportunidad de manejar todo a medida que van surgiendo en el día.
Busca inspiración en una personalidad admirable
Busca a alguien digno de mención que haya pasado por un periodo de estrés prolongado. Haz hincapié en las partes de sus historias que hablan de la capacidad de recuperación cuando se enfrentan a esta situación, incluso si no fueron perfectos. Elige una personalidad admirable que también tenga vulnerabilidades notables.
Autocuidado sagrado
Necesitamos resistencia emocional y física para soportar períodos prolongados de estrés. El autocuidado es uno de los mejores métodos para aumentar las reservas de resistencia. Puede ser tan sencillo como moderar el ejercicio, descansar lo suficiente y alimentarse bien.
Controle su ritmo para fomentar el autocuidado
Adopte algunos métodos fáciles y sencillos que le ayuden a reducir su ritmo diario. Un ejemplo sería una sesión de meditación de 10 minutos cada mañana. También puede ser la lectura de artículos inspiradores que puedan elevar nuestra energía.
Ser compasivo y estar conectado con los demás
Soportar periodos prolongados de estrés requiere la compasión de quienes nos rodean. Por ello, es nutritivo ser compasivo con los demás. Te hará sentir conectado y útil. Conocer el sufrimiento de los demás también puede ayudarnos a sentirnos menos solos en nuestro propio sufrimiento.
Tomar descansos regulares de las cosas que están relacionadas
Las rutinas son calmantes, así que conviértalas en una parte regular de las actividades diarias. No hay necesidad de sentirse culpable por ello, ya que esto aumentará nuestra resistencia al enfrentarnos a un estrés prolongado.
Buscar un momento de alegría cada día
No hace falta que sea algo grande para que sea extremadamente curativo. Puede ser algo muy sencillo como hacer reír a un compañero o algún acto de amabilidad al azar de un desconocido. Encuentre esos pequeños momentos y concéntrese en la positividad del momento y en su curación.
Controla sólo lo que puedas
Algunos aspectos de la situación están fuera de nuestro control. Centrarse en ellos sólo aumenta el estrés. Así que céntrate en las cosas que están bajo tu control. Puede ser un cambio de actitud. Si no, intenta controlar sanamente otras áreas de la vida, como la limpieza del hogar.
Escuchar nuestro diálogo interior
Es normal tener muchas emociones y pensamientos negativos cuando nos enfrentamos a periodos prolongados de estrés. Busque apoyo cuando note que tener esperanza es cada vez más imposible. Las afirmaciones positivas también pueden ser beneficiosas.
Recoge un pasatiempo creativo
Las aficiones creativas son especialmente beneficiosas para las personas sensibles. Pueden ser un retiro temporal de la dureza de la vida y permitirles una oportunidad de reponerse. Pueden ser pasatiempos que sólo necesitan inversión de tiempo como cocinar.
Pedir ayuda
Los periodos de estrés prolongado hacen que todos busquemos ayuda, independientemente de la magnitud de la situación. Los toques saludables, como los masajes o los abrazos, o simplemente conseguir que un amigo te escuche, son formas estupendas de recibir apoyo. Todos nos beneficiamos de la presencia de los demás. Así que no dudes en pedir la ayuda que te mereces.