Saludos y amor extiendo a través de mi ser hacia ti, mientras te abrazo con calidez, amor y sabiduría. Permite que mi energía fluya a través de ti.
Es momento de dejar caer todas aquellas creencias innecesarias, energías estancadas, confusión y caos. Es necesario que surja una creencia interior; una creencia tan fuerte y poderosa que transforme tu realidad.
Cuando permites que todo lo que ya no necesitas se disuelva y abrazas un conocimiento interior, una fe y una confianza profunda, observarás una transformación tanto en tu interior como en tu mundo exterior.
Es importante que sepas que estás a salvo en este momento. A medida que avanzas, también estás seguro dentro de mi abrazo amoroso, así como en el abrazo amoroso de tus guías, tu alma, tu grupo álmico y el Creador.
Estás dando pasos cautelosos hacia adelante. Puede que tengas una visión, un sueño o una intención en mente, deseando que esa intención se materialice en tu presente. Lo que se necesita ahora es permitirte ser completamente abrazado por el amor, absorber y aceptar ese amor en su totalidad, dejando ir todo lo que ya no te sirve.
Es posible que esas cosas que ya no necesitas se sientan como si fueran indispensables, pero permíteles irse. Puede haber creencias, e incluso hechos que parecen inamovibles, diciéndote que es imposible soltar ciertas energías y creencias; diciéndote que es imposible manifestar tu sueño, meta, deseo o intención.
Es momento de permitir que todo aquello que parece imposible o inamovible fluya fuera de ti, de modo que lo único que quede, energéticamente, en tu mente, en tu corazón y en tu ser, sea una creencia interna: una conexión con lo Divino, una conexión contigo mismo, una certeza interior de que todo evolucionará perfectamente para ti y que podrás experimentar tu sueño, meta o deseo.
Esa certeza interior, esa creencia, esa confianza en lo divino, en el flujo sagrado, y la confianza en que eres apoyado en cada momento, es lo que necesita ser magnificado y manifestado desde dentro de tu ser.
Cuando te permites ser guiado por lo divino, no significa que puedas simplemente relajarte y esperar que lo divino haga todo por ti, porque ese estado solo te llevará hasta cierto punto. Es necesario rendirse al apoyo divino, permitir que te lleve hacia adelante, pero al mismo tiempo, estar alerta y consciente.
Preguntas para reflexionar:
- ¿Qué puedes crear y transformar dentro de tu ser?
- ¿Qué acciones son necesarias en tu realidad?
- ¿Qué necesitas hacer en este momento presente para generar los cambios necesarios?
Muchas personas están embarcándose en un gran desafío de ascensión: manifestar lo imposible o aquello que les parece imposible, permitiendo que el Creador lo haga realidad.
Para permitir que el Creador lo manifieste, se necesita una fe profunda en uno mismo y en el Creador. Se requiere estar en el flujo divino, rendirse, lo que significa abrirse completamente y permitir que la vida te lleve, aceptando la ayuda en cualquier forma en que se presente.
Esa fe generará activaciones y transformaciones dentro de tu ser, permitiendo que muchas perspectivas, creencias limitantes, energías estancadas y confusión se disuelvan, al igual que la sensación de que algo es imposible. Es como si derribaras un muro de ladrillos que te ha limitado por mucho tiempo.
Cuando te conectas con lo divino y sientes su apoyo, podrás seguir tu guía interior para tomar las acciones necesarias.
Algunas de estas acciones pueden hacerte salir de tu zona de confort. En este gran desafío de ascensión, es importante sentirse seguro; aunque te encuentres fuera de tu zona de comodidad, debes asegurarte de que siempre te sientas seguro. Tú eres tu propio apoyo. Es fundamental confiar en el apoyo divino, pero también en tu propia capacidad de sostenerte; tener tu propia red de seguridad, por si acaso.
A veces, lo divino te pide que confíes en ti mismo; que veas, sientas y reconozcas el poder y la fortaleza que posees dentro de tu ser. Esto es necesario para apoyarte y permitirte conectar aún más profundamente con la ayuda divina.
Un ejercicio para los próximos días:
Te invito a reflexionar sobre qué aspectos de tu vida (o de tu crecimiento espiritual) parecen imposibles de cambiar. ¿Qué es aquello que sientes inamovible o inalcanzable, pero que al mismo tiempo despierta un profundo anhelo en ti?
Puede ser algo pequeño o un gran sueño, deseo o meta. Sea lo que sea, contempla su significado y conéctate con tu fuerza interior, tu fe y tu conexión con lo divino.
Afirma, empodera y refuerza, a través de la contemplación, la meditación, las afirmaciones y las visualizaciones, que:
- Eres poderoso.
- Crees en ti mismo.
- Confías en el Creador.
- Eres apoyado y guiado en cada momento.
A medida que esta energía se fortalezca y continúe evolucionando, notarás cómo viejas creencias y perspectivas limitantes empiezan a desaparecer. Incluso si tu sueño, meta o deseo no se manifiesta exactamente como lo imaginaste, tal vez algo aún más grandioso esté ocurriendo.
Recuerda que el tiempo no existe, por lo que no podemos decir cuánto tardará en manifestarse.
Cuanto más creas en ti mismo, cuanto más sostengas la fe, la esperanza y el valor, y permitas realmente el apoyo del Creador, más verás que todo lo innecesario desaparece y que ocurre una transformación dentro de tu ser.
El verdadero propósito de este proceso:
No es la manifestación en sí lo que realmente importa, sino la transformación interna.
Esa transformación es donde reside la verdadera magia: en la fe en ti mismo, en tu divinidad, en tu conexión con el Creador y en los cambios que ello genera en tu ser.
Eso es lo que realmente significa el proceso de ascensión: permitir que llegue lo que deba llegar, apoyar las acciones necesarias en tu realidad y permitir que lo divino actúe a través de ti.
¿Permitirás que la magia se despliegue a través de estas transformaciones?
La decisión es tuya.
Yo, el Maestro Kuthumi, estoy aquí para apoyarte, amarte y compartir sabiduría contigo.