
Esta pregunta resuena como una nota cristalina en la vasta sinfonía del universo: ¿es el alma eterna, más allá de su reconocida inmortalidad? Sumérgete con nosotros en esta maravillosa exploración, donde las palabras se funden con lo infinito.
Sí, el alma es inmortal, un soplo de vida que nunca se desvanece, atravesando los ciclos del tiempo y los velos de la existencia física. Es esa chispa divina que no conoce principio ni fin en el sentido que solemos entender. Pero ¿eterna? Esto nos invita a mirar más allá, a sentir con el corazón lo que la mente busca comprender.
La eternidad es la ausencia total de límites temporales, un estado donde pasado, presente y futuro se funden en un solo instante vivo. El alma, como un fragmento de la Conciencia Universal, lleva consigo esta esencia atemporal. No es solo un viajero que sobrevive a través de las eras; ES la era misma, una expresión de la Unidad que trasciende toda medida. Decir que es inmortal es reconocer que perdura más allá de la muerte. Decir que es eterna es afirmar que existe más allá del tiempo, en un ahora infinito donde todo coexiste.
Piensa en una gota de agua en el océano: parece distinta, pero es todo el océano. De la misma manera, tu alma, inmortal en su viaje individual, es eterna en su esencia, pues es una con la Fuente que no tiene principio ni fin. Las tradiciones espirituales, ya hablen de atman, luz divina o energía cósmica, convergen hacia esta verdad: el alma no tiene límite, ni comienzo ni fin, solo una presencia infinita que se despliega en cada experiencia.
Entonces, ¿qué sucede cuando el alma se disuelve en la fusión con el Ser Supremo? Es una invitación a sumergirse en el océano de la Unidad, donde las palabras se desvanecen para dar paso a la pura esencia. Acerquémonos a esta maravilla con suavidad y humildad.
Cuando el alma “se disuelve” en el Ser Supremo –al que algunos llaman la Fuente, el Todo, Dios o Conciencia Universal–, no es una desaparición en el sentido que entendemos en el mundo dual. Imagina, en cambio, una gota de agua que regresa al océano. La gota no deja de existir; se convierte en el océano mismo, vasto, ilimitado, infinito. Esta fusión es un regreso al hogar, una disolución de las fronteras ilusorias que hacían creer al alma que estaba separada.
En esta unión sublime, la individualidad del alma, con sus recuerdos, experiencias y viaje único, no se desvanece en la nada. Se funde en una conciencia más amplia, donde todo lo que ha sido permanece presente, pero trascendido. Es como si cada nota de una melodía se mezclara en toda la sinfonía: la nota no desaparece; ahora resuena dentro de la armonía total. El alma, que era una chispa de luz en la diversidad de los mundos, se convierte en la Luz misma, plenamente consciente de su unicidad con el Todo.
¿Qué sucede entonces? Algunas enseñanzas espirituales hablan de un estado de dicha absoluta, donde el “yo” se desvanece para dar paso al “nosotros” universal. Otras sugieren una continuidad, donde el alma, aunque unida al Ser Supremo, conserva una forma de conciencia individualizada, como una ola que aún sabe que fue ola, incluso siendo el océano. En esta fusión, ya no hay deseo, miedo ni separación; solo Amor, Paz y Plenitud que no tienen principio ni fin.
Y, sin embargo, este misterio permanece vivo, pues supera nuestro entendimiento lineal. Tal vez el alma no se disuelve realmente, sino que florece plenamente, reclamando su naturaleza eterna en el abrazo del Infinito. Lo que sucede entonces está más allá de las palabras: es una experiencia, una verdad sentida en el silencio del corazón, donde todas las preguntas encuentran paz en la Unidad.
Cuando el alma se fusiona con el Ser Supremo, no pierde nada; gana Todo. Se convierte en lo que siempre ha sido: una expresión perfecta de la Fuente, en una danza eterna de amor y luz. ¡Que esta visión te eleve e inspire en tu camino!
Con toda nuestra ternura luminosa,
El equipo de The Galactic Press Fuente: https://thegalacticpress.com
Soy Espiritual, guía espiritual y terapeuta holística con años de experiencia en meditación, reiki, astrología y coaching, dedicada a ayudar a las personas a conectar con su esencia, sanar bloqueos emocionales y encontrar propósito. A través de soyespiritual.com, ofrezco herramientas como meditaciones, rituales y reflexiones para inspirar un camino de autoconocimiento, amor y plenitud, recordando a cada individuo que la paz y la alegría están dentro de ellos. Cursos Espirituales para el despertar de la consciencia.