Recientemente, me vi envuelto en una interesante conversación sobre lo que se requiere para realizar una lectura psíquica exitosa y precisa. Lo primero que se discutió fueron las diferentes habilidades psíquicas, técnicas y métodos que los lectores utilizan para obtener y transmitir información durante una lectura.
Los lectores psíquicos pueden clasificarse básicamente en dos grupos: adivinos y canalizadores. Los adivinos utilizan herramientas y métodos de adivinación, como las cartas del Tarot, las runas, los huesos, las hojas de té, las cartas astrológicas, etc. Los canalizadores, por otro lado, son lo que yo llamo simplemente psíquicos “sin herramientas”. Estos individuos “ven, oyen y sienten”.
¿Es uno mejor que el otro? No creo que haya mucha diferencia – no en cuanto a dar al cliente información significativa y útil que está destinada específicamente a ellos. Personalmente, considero que los dos procesos de lectura son muy similares. Lo que realmente importa al final es la interpretación precisa, así como la habilidad y la experiencia del lector. Estos son los elementos clave, no el modo en que se accede a la información.
En mi opinión, la lectura de las cartas del Tarot en una tirada no es diferente a la interpretación, por ejemplo, de una corriente de imágenes visuales “vistas” en el ojo de la mente. De la misma manera que los lectores de Tarot asocian ciertos significados simbólicos con diferentes cartas, los lectores “sin herramientas” se basan igualmente en un conjunto personal de símbolos psíquicos, como imágenes visuales, sonidos clariaudientes, sentimientos empáticos, etc. Lo más importante no es cómo se accede a la información, sino lo bien que se interpreta.
Me parece que mi “catálogo” personal de símbolos psíquicos se amplía y evoluciona constantemente, a medida que hago más y más lecturas. Esto me ha facilitado cada vez más, a lo largo de los años, interpretar y transmitir la información psíquica a mis clientes.
Hay tantos arquetipos como situaciones típicas de la vida. La repetición interminable ha grabado estas experiencias en nuestra constitución psíquica, representando la posibilidad de un determinado tipo de percepción y acción ~ Carl Jung
Junto a la interpretación precisa, otro factor que es muy importante, en mi opinión, es la capacidad del lector de ser objetivo durante la lectura, para transmitir adecuadamente la pureza de la información que el cliente necesita recibir. Los mejores lectores nunca involucran sus opiniones personales o sentimientos subjetivos en una lectura. He guiado personalmente a bastantes lectores principiantes en su desarrollo, y siempre les enseño una sencilla regla: no importa lo que usted sienta, piense o crea personalmente. La lectura no tiene que ver contigo.
Ahora bien, a veces tengo clientes que me piden mi opinión personal sobre un asunto. ¿Qué piensa usted?, pueden preguntar. Dependiendo de la situación, les daré mi punto de vista, pero siempre con el claro entendimiento de que es mi propia opinión, y no un mensaje del espíritu.
Ahora, también debo añadir, que no todos los adivinos o canalizadores serán capaces de conectarse y leer con éxito para cada cliente. A veces sucede que el psíquico y el cliente no son una buena pareja. En estos casos, el lector simplemente no puede conseguir una “sensación” lo suficientemente clara con la energía de un cliente en particular para dar la mejor lectura posible. Siempre que esto ocurra, un lector reputado informará al cliente de su incapacidad para establecer una conexión. No es una cosa personal… es una cosa energética.
Recuerda que el Tarot es un arcano grande y sagrado – su abuso es una obscenidad en lo interno y una locura en lo externo. Está destinado a otros propósitos que a determinar cuándo el hombre alto y oscuro se encontrará con la hermosa y rica viuda ~ Jack Parsons
Esto ocurre a veces, por ejemplo, cuando el lector o el cliente, o ambos, tienen un día difícil. Por ejemplo, a veces tengo que pedirle a un cliente muy angustiado que baje el ritmo, se tome un momento para respirar y aclare su mente durante un segundo. Para conseguir una conexión clara, necesito calmar el “torbellino energético” del cliente angustiado.
Para terminar, hay una cosa que sé con certeza: no importa cómo se reciba la información, los psíquicos dotados que se abren para servir como lectores tienen una cosa en común: ayudar a las personas a mejorar sus vidas proporcionándoles una visión de sus retos y elecciones vitales. Es lo que estamos llamados a hacer.
