Nuestro Cosmos es un misterio que aún no hemos descifrado.
Para que nuestra vida en la tierra sea más fructífera y significativa, siempre hay sucesos y señales que nos guían en el viaje de la vida. La mayoría de las veces, su origen escapa a nuestra comprensión.
Desentrañar los secretos de la naturaleza
Las experiencias mágicas han sido la piedra angular de las prácticas religiosas y espirituales desde tiempos inmemoriales. Por lo general, estas experiencias son de corta duración, se sienten inmensamente significativas o profundas y destrozan algunas de nuestras ideas preconcebidas. Podemos encontrarnos con conceptos paradójicos o extraños de primera mano, como la no-dualidad, la comprensión de que nada en el mundo está realmente separado, o la impermanencia, la conciencia de que todo es temporal.
Desde el siglo XIX, estas experiencias sobrenaturales han evolucionado como un concepto distintivo. La expresión define que no se puede dar un informe adecuado de su contenido con palabras.
Está estrechamente relacionado con el misticismo, pero hace hincapié únicamente en el aspecto experiencial, ya sea espontáneo o inducido por el comportamiento humano. El misticismo abarca un amplio abanico de prácticas cuyo objetivo es la transformación de la persona y no sólo la inducción de sucesos místicos.
Aunque los investigadores han tratado de averiguar la razón de estos encuentros, que no tienen un razonamiento lógico, han fracasado. A menudo se afirma que el lóbulo temporal del cerebro desempeña un papel importante en estos sucesos místicos. Pero estas afirmaciones no han resistido el escrutinio.
En las tradiciones místicas y contemplativas, estos sucesos no son un objetivo en sí mismos, sino que forman parte de un modo más amplio de autoevolucionar para mejor.
A medida que avanzamos por el camino de la vida, hay numerosos incidentes y sucesos que nos resultan alucinantes. Como seres humanos, no podemos discernir por qué y cómo ocurrió un determinado incidente.
No cabe duda de que un poder tan grande está controlando nuestras vidas. En nuestro contacto con la naturaleza, quedamos hipnotizados por su belleza y su poder. La complejidad y la enormidad de los acontecimientos de la vida siguen siendo en su mayoría un enigma para nosotros. La idea del misterio motiva la producción de conocimiento o al menos la indagación.
El misterio impulsa la investigación y traza los contornos del discurso. Determina los signos y las pistas que se siguen. Aunque a veces, sobrepasa la razón humana y se sitúa en algún lugar más allá de los límites del conocimiento humano actual.
Limpiar la mente y el cuerpo de negatividad y pesimismo da paso a mucha positividad y optimismo. Se siente cuando estamos rodeados de un entorno etéreo. Suele tener un buen efecto en nosotros.
Hay ciertos lugares en el mundo donde nos sentimos en sintonía con el Poder Supremo. Esto depende de nuestra mentalidad y procesos de pensamiento. Tener fe y confianza en el Poder Supremo en todos los ámbitos de nuestra vida hace que nuestro viaje sea mucho más fácil y sencillo.
Seguir el camino de la honestidad, la tolerancia y la compasión nos ayuda a sentir este poder a nuestro alrededor. Nos empuja a conseguir lo inalcanzable. Nos da la confianza necesaria para enfrentarnos a los problemas de la vida con un entusiasmo renovado. La actitud de no morir se acentúa en nosotros.
La oración es una herramienta poderosa que nos ayuda a obtener una conexión directa con el Ser Supremo. Evoca en las personas la comprensión de que la tolerancia, la empatía y la bondad harán que, a la larga, la vida sea más enriquecedora y merezca la pena. Ayuda a reducir la ansiedad y el estrés. Nos calma por dentro.
El agradecimiento y la gratitud por todos los regalos de la vida son una necesidad. La oración fomenta el sentido de la conexión. Reduce los sentimientos de depresión, aislamiento y miedo. Este vínculo profundo e inquebrantable nos da la fuerza para superar los obstáculos de la vida. La meditación también es una herramienta positiva que cambia la vida.
